miércoles, 21 de mayo de 2008

MANOLÍN




Manuel Frade Rojí nació en Barakaldo (Vizcaya) el 24-02-1907.


La elegacia de un gladiador en la defensa, esa es la frase que mejor define a Manolin Frade. Nacido en Barakaldo, muy pronto su familia vino a Ferrol y el joven Manolín empezaría en nuestra ciudad a dar patadas a un balón en la demarcación de defensa derecho. Jugó en el Fortuna ferrolano en 1923-24 y de ahi pasó al Racing, donde permaneció entre las campañas 1924-25 y 1931-32. Debutó en competición oficial con equipo verde el 23 de Noviembre de 1924 en un partido del campeonato gallego delante del Unión Sp. olívico y desde entonce haría de su eterna sonrisa y del pañuelo blanco en la frente o en el cuello elementos inconfundibles de su imagen. No tardó nada en erigirse en un fijo incuestionable en la defensa racinguista junto a Francisco Cobelo. Desde 1926-27 su compañero en esa tarea pasó a ser Alejandro, mucho más veterano que él pero con el que se compenetró perfectamente. Cuando el riojano causó baja, fue el carballés Benito Pérez “Moreno” un nuevo compañero de Manolín en los labores de retaguardia.
Con todos ellos Manolín dió la talla, aportando sus cualidades de defensor ágil, rápido, impetuoso, muy brillante en los despejes de cabeza y elegante en la concepción del juego. Constituía un futbolista ordenado, de estilo fino, de fútbol alegre y eficiente, combativo y inteligente, sin brusquedades, ideal para un compañero de retaguardia que tuviese en la técnica su principal virtude.

El de Barakaldo fue otro de los “Diablos Verdes” salientables, indiscutible jugador del Racing de finales de la década de 1921-30 y comienzos de la siguiente, pretendido por D. La Coruña y Alavés luego de la excelente temporada en la que el equipo ferrolano se proclamara campeón gallego invicto y cayera ante el Ath. Bilbao en los octavos de final de la Copa del Rey.
En su tiempo fue uno de los mejores defensas de Galicia junto al deportivista Otero, el céltico Pasarín o su compañero racinguista Alejandro y integró el once de la selección gallega en los partidos ante el combinado regional del Centro y el D. La Coruña en el año 1929. En el primero de esos choques hizo pareja en la retaguardia con Pasarín.

Jugador muy querido por la afición del Inferniño, aconstumbrada en aquellos años a ver a excelentes futbolistas, Manolín sempre fue recordado como un auténtico ídolo, como uno de los referentes de toda una época. Por eso, en 1967, el club verde le concedió la Insignia de Oro en los prolegómenos de la final del trofeo “Concepción Arenal” (que disputó el equipo verde contra el Celta).
Manolín Frade falleció en Ferrol el 23-11-1979. Se iba uno de los mejores defensas de la historia verde. Uno de los que hicieron grande al Racing en los terrenos de juego y en las memorias deportivas.


Fuente : Circulo Racinguista

1 comentario:

Anónimo dijo...

Jamas OLVIDARE,a my TIO MANOLIN FRADE ROJI,por su NOBLEZA,